La espinaca, también conocida por su nombre científico Spinacea Oleracea, es una de las plantas de gran uso como verdura en muchas de las gastronomías al nivel mundial tanto por sus versatilidad como por su sabor y beneficios.
Su presentación es la de una hoja comestible de color verde oscuro. El tamaño no excede los diez centímetros y se les suele también consumir mucho cuando la hoja es chica. Existen tres principales variante de espinacas. Las más comunes para comerse cocidas son la de hoja liza y la de hoja rizada. La tercera conocida como espinaca “baby” o “tierna” (de hoja chica), es consumida generalmente cruda para ensaladas.
Las preparaciones culinarias con espinacas son extremadamente variadas ya que este vegetal puede ser consumido cocido o crudo de manera indistinta conservando siempre su sabor y cualidades.
Las propiedades benéficas de la espinacas son principalmente sus altos niveles de vitaminas A y E así como yodo. Además permite un aporte importante de antioxidantes que son útiles para nuestro cuerpo. Sin embargo la espinaca contiene niveles elevados de ácido oxálico que puede llegar a ser tóxico para el cuerpo humano por lo que se recomienda evitar consumirla en exceso.
Como pueden ver la espinaca es sin lugar a duda uno de los vegetales más versátiles que se pueden encontrar en prácticamente todo el mundo y que combina con un sinfín de platillos como: una ensalada de espinacas, tocino y nuez, un pay de espinacas con crema o un energético licuado de espinacas y apio.
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