Hoy te propongo una idea que sale un poco de lo habitual y que podrás hacer perfectamente en casa para disfrutar en familia. Es perfecta si buscas una alternativa de pizza sin carnes o embutidos y estas un poco cansado de las pizzas vegetarianas de siempre. Se trata de una pizza casera de espinacas que resulta sorprendentemente interesante por su sabor, su sencillez de preparación y por la poca cantidad de ingredientes que vas a necesitar.
Por supuesto, haremos la masa de pizza en casa y para esto es necesario que tengas en mente que necesitarás un poco de tiempo adicional para dejarla reposar. Cuenta más o menos una hora para dejar que la masa se eleve y aproximadamente otros unos cuarenta minutos para todo el proceso de preparación y cocción. Puedes hacer esta pizza con alguna masa ya preparada pero ya sería otro tipo de experiencia ya que nos perderíamos del placer de hacer nuestra propia masa de pizza. Una particularidad de mi pizza es que voy a usar el mismo queso mozzarella como base y así no usar puré de jitomate ni crema. El mismo queso se vuelve base y cobertura, es una delicia. ¡Así que manos a la obra!
Para la masa vamos a mezclar en un cuenco todos los ingredientes. Con las manos vamos amasando hasta obtener una consistencia lisa y homogénea. Formamos una bola que dejamos en el cuenco, recubrimos de un trapo seco y limpio para dejar reposar alrededor de una hora. Como mínimo tienes que dejar tu masa reposar unos 45 minutos.
te recomiendo disfrutar de tu pizza bien caliente y recién salida del horno. La puedes acompañar de una ensalada así como de una copa de vino blanco seco bien frío. Si la vas a recalentar, te recomiendo usar el horno tradicional y no el microondas.
adriana
hola quisiera recetas saludables